Los arrestos de Frida Kahlo y su resiliencia artística

La artista mexicana e icono feminista Frida Kahlo es probablemente la artista más famosa del mundo.

En la última década, sus obras se han vendido por millones de dólares en subastas, batiendo récords entre los cuadros de artistas latinoamericanos. Y a menudo se celebran detalles de su vida en libros, obras de teatro, óperas e incluso exposiciones de jardinería.

Sin embargo, entretejidos en el tapiz de su existencia, aún hay secretos menos conocidos, que se revelan con el paso del tiempo.

Uno de esos grandes secretos son los días que pasó en la cárcel, arrestada.

Frida Kahlo en la cárcel

Algunas fuentes afirman que Kahlo fue arrestada tres veces en su vida: dos por motivos políticos y una por asesinato.

Algunas fuentes afirman que la primera vez que arrestaron a Kahlo fue en 1932, junto con su novio, Alejandro Gómez Arias, que era un activista estudiantil.

«En julio de 1932, la artista mexicana Frida Kahlo fue arrestada y encarcelada por su papel en un levantamiento estudiantil en su escuela, la Escuela Nacional Preparatoria», escribe una galería de bellas artes en el área metropolitana de Washington D.C. «El levantamiento se produjo en protesta por el trato que el gobierno daba a los presos políticos. Kahlo y sus compañeros fueron liberados a los pocos días…».

En agosto, un mes después, algunos dicen que enfrentó otro arresto debido a su participación en una protesta contra el cierre de la Escuela Nacional Preparatoria por parte del gobierno.

«Estuvo detenida una semana antes de ser puesta en libertad bajo fianza», explica Huckleberry Fine Art.

Es arrestada por un brutal asesinato

En el verano de 1940, Kahlo fue arrestada de nuevo. Esta vez, por asesinato.

«Después de que el español Ramón Mercader asesinara a Trotsky, Frida Kahlo y su hermana Cristina Kahlo pasaron dos días en la cárcel tras horas de interrogatorio», explica El País.

La policía de Ciudad de México la consideraba posible cómplice del asesinato del aguerrido revolucionario ruso León Trotsky.

Pocos días antes del arresto de Kahlo, Trotsky había tenido un final espantoso, atacado mortalmente con un picahielo.

«Su asesinato –y la implicación de ella en el crimen– fue un giro dramático de los acontecimientos, sobre todo teniendo en cuenta que Kahlo y Trotsky habían sido vertiginosos amantes solo tres años antes; ella incluso le había dedicado un impresionante autorretrato«, escribe Artsy.net.

Kahlo y su esposo, el famoso muralista Diego Rivera, conocieron al revolucionario ruso en 1937.

«Fue Rivera quien convenció al presidente mexicano Lázaro Cárdenas para que ofreciera a Trotsky asilo político en México», explica Artsy.net.

Durante varios años, Trotsky y su esposa residieron en la Casa Azul de la pareja, donde se desarrolló un inesperado enredo romántico entre Trotsky y Kahlo.

«En 1940, él fue asesinado y Kahlo, junto con su hermana, fue encarcelada brevemente como sospechosa. Aunque conocía al hombre que cometió el asesinato, finalmente fue absuelta y puesta en libertad al cabo de dos días», escribe My Modern Met.

Curiosamente, Rivera también iba a ser arrestado.

«Cuando Diego se ve implicado en un intento de acabar con la vida de Trotsky, huye a San Francisco, dejando a Frida en Ciudad de México, donde finalmente es arrestada», escribe WPBS.

Aunque los arrestos de Kahlo añaden intriga a su enmarañada vida, es de esperar que sus pinturas sigan definiéndola.

«La pintura completó mi vida», dijo Kahlo en una ocasión.

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