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El Porvenir Marker, tal como está, es una simple placa negra y plateada con tres párrafos de texto, ubicada 27 millas al oeste de Marfa, TX, en la Ruta Federal 90. Los tres párrafos de texto intentan describir los horrores que ocurrieron en esa área desolada del desierto hace más de 100 años, que son conocidos como La Masacre de Porvenir
Porvenir era un pequeño poblado a orillas del Río Grande, donde vivía muy poca gente. Se trataba principalmente de pequeñas familias de agricultores mexicanos que tenían una existencia pacífica cuidando la tierra, su familia y su comunidad extendida.
Sin embargo, durante la época de la Revolución Mexicana, creció la tensión entre los nacionales mexicanos/estadounidenses que originalmente vivían en esa tierra y los habitantes texanos de los recién formados Estados Unidos. Este último había establecido recientemente fronteras que separaban la tierra que inicialmente albergaba a tribus indígenas.
De hecho, se registró que, entre 1848 y 1928, 232 mexicanos fueron linchados solo en Texas. Esta mayor tensión provocó un estallido de violencia entre la Navidad de 1917 y enero de 1918.
El 25 de diciembre de 1917, un ranchero local llamado Lucas Brite sufrió un ataque en su propiedad por personas que se cree que eran partidarios del líder revolucionario mexicano Pancho Villa. Durante la redada, un cartero de la zona resultó muerto.
Si bien la historia nunca ha demostrado quiénes fueron los hombres que atacaron el rancho ese día, parece señalar al hecho de que ninguno de ellos tenía conexión alguna con el poblado de Porvenir. Desafortunadamente, nada de eso importó a los habitantes, quienes buscaron venganza por la agresión.
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El 28 de enero de 1918, un grupo de comandos locales, acompañados por un grupo de Rangers de Texas y soldados del 8º Regimiento de Caballería de Estados Unidos llegaron al poblado de Porvenir y comenzaron a ir de casa en casa. Los mercenarios obligaron a 15 hombres y jóvenes de entre 16 y 64 años a abandonar sus hogares y marchar hacia el desierto cercano a punta de pistola. Después de que llegaron, los mercenarios dispararon y mataron a todos ellos:
- Pedro Herrera
- Antonio Castañeda
- Longino Flores
- Juan Jiménez
- Vivian Herrera
- Eutemio González
- Manuel Morales
- Ambrosio Hernández
- Pedro Jiménez
- Macedonio Huerta
- Román Nieves
- Severiano Herrera
- Alberto García
- Tiburcio Jáquez
- Serapio Jiménez
La lucha para que se colocara la placa de Porvenir recordando la masacre fue encabezada parcialmente por el hijo de Longino Flores, Juan Flores.
Juan tenía 12 años en el momento del incidente y antes de morir habló sobre el recuerdo de despertarse en medio de la noche y ver cómo hombres armados se llevaban a su padre. También habló del recuerdo del día siguiente, cuando encontró el cuerpo de su padre, apenas reconocible, en el desierto.
La masacre de Porvenir representa un momento peligroso para las personas de ascendencia mexicana en la historia de Estados Unidos. Si bien el marcador de ninguna manera hace justicia tras lo ocurrido, es uno de los pocos lugares en el registro histórico que recuerda los hechos vividos en ese lugar.
Ubicación: Porvenir, Condado de Presidio, Texas.
Dirección: US-90, Marfa, TX 79843, Estados Unidos.
Visita el Marcador de Porvenir aquí.
Por Liv Styler
Olivia Monahan – Periodista, editora, educadora y organizadora chicana en Sacramento cuyo único objetivo es arrojar luz sobre historias de nuestras comunidades más impactadas y marginadas pero, aún más importante, que esas historias humanicen a quienes normalmente quedan excluidos. Es finalista de la Beca Ida B Wells de periodismo de investigación 2022, miembro de la Parenting Journalists Society y ha publicado en The Courier, The Sacramento Bee, The Americano y Submerge Magazine, entre otros.
