América Ferrera y el monólogo que definió a Barbie

Crédito: Wikimedia Commons / Ilustración de Nuestro Stories

La temporada cinematográfica de este verano ofreció al público una gran cantidad de títulos en los cuales sumergirse. Entre ellos, nada ha sido más popular que el bombo y platillo de BarbenHeimmer, un par de películas (Barbie y Oppenheimer) que son tan opuestas y, sin embargo, se complementan como la sal y la pimienta. Sin embargo, en lo que respecta a estas dos películas, la primera ofreció quizás uno de los monólogos más sugerentes de la historia reciente del cine.

Sin embargo, uno de los aspectos más sorprendentes de la película es su exploración de los sueños de una joven latina, interpretada por Ariana Greenblatt, y su madre, retratada por la actriz de 39 años América Ferrera, de ascendencia hondureña. De hecho, son las palabras de Ferrera las que pueden quedar en vivo para la historia del cine, como el monólogo de Edward James Olmos sobre ser mexicano en la clásica película Selena (aunque por otros motivos).

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Spoiler: El impactante monólogo de América Ferrera en Barbie

«Es literalmente imposible ser mujer. Eres tan guapa y tan inteligente, y me mata que no creas que eres lo suficientemente buena.

Se espera de nosotras que seamos extraordinarias todo el tiempo, pero de alguna manera, siempre se nos considera equivocadas. Tienes que ser delgada, pero no demasiado. Y nunca puedes decir que quieres estar delgada. En lugar de eso, debes decir que quieres estar sana, pero incluso entonces, se espera que estés delgada.

“Debes tener dinero, pero pedirlo se considera una grosería. Debes ser jefa, pero no puedes ser mala. Debes liderar, pero no puedes suprimir las ideas de los demás.

“Tienes que amar ser madre, pero no puedes hablar de tus hijos todo el tiempo. Como mujer de carrera, siempre debes mirar por los demás.

“Tienes que responder del mal comportamiento de los hombres, lo cual es una locura, pero si lo señalas, te acusan de quejarte.

“Se espera de ti que estés guapa para los hombres, pero no tanto como para tentarles demasiado o amenazar a otras mujeres, porque se supone que formas parte de la sororidad. Destaca siempre y sé agradecida, pero nunca olvides que el sistema está amañado. Así que encuentra la manera de reconocerlo sin dejar de estar agradecida.

“Nunca debes envejecer, nunca debes ser grosera, nunca debes presumir, nunca debes ser egoísta, nunca debes caer, nunca debes fracasar, nunca debes mostrar miedo y nunca debes salirte de la fila.

“Es demasiado difícil. Es demasiado contradictorio, ¡y nadie te da una medalla ni te da las gracias!

“Y, de hecho, no solo lo haces todo mal, sino que todo es culpa tuya. Estoy tan cansada de verme a mí misma y a todas las demás mujeres atarse en nudos solo para complacer a los demás.

“Y, si todo eso también es cierto para una muñeca que representa a las mujeres, entonces, ni siquiera lo sé».

El monólogo fue escrito por la directora y coguionista de la película, Greta Gerwig, junto con su compañero, Noah Baumbach, y arroja luz sobre las luchas que enfrentan las mujeres, la presión de las numerosas expectativas que recaen sobre ellas y lo agotador que resulta. Quienes no se dejen intimidar por palabras concretas como «patriarcado» sin contexto y permitan que la historia se desarrolle descubrirán un poderoso mensaje en la película.

El discurso del personaje de la madre latina de Barbie a las muñecas da de qué hablar, y eso es lo que lo convierte en un clásico instantáneo en lo que a guiones cinematográficos se refiere.

Aunque el monólogo tiene mucha profundidad, Barbie sigue siendo una película cómica muy divertida. Si no es de tu gusto, ¡no pasa nada! El cine es arte, y el arte es subjetivo, que es una de las cosas bonitas que tiene.

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